Sigo paradójico: he subido a lavarme las heridas al arroyo luminoso. Como cada cuaresma, he ido a bañarme a la Pasión según San Mateo. Un sitio formidable al que se llega poniendo en el GPS: BWV 244.
Ya todos sabemos que Bach significa "arroyo".
Que "Mache dich, mein Herze, rein" significa, "Puríficate, corazón mío" os lo cuento sólo a quienes no sepáis algo de la lengua de Lutero.
Pero a todos aconsejaría la lectura de este breve artículo de Ramón Andrés:
http://www.webdemusica.org/files/articles/andresr_pasionsanmateo.pdf
Preferentemente DESPUÉS de dedicarle el largo rato que precisa bañarse en este arroyo luminoso. Lo escribió Cernuda: “Si algo puede atestiguar en esta tierra la presencia de un poder divino, es la luz”.Qué paradójico es escribir luz en negrita. Si falta en las noticias, en los trabajos o en la salud, hay un arroyo luminoso que siempre nos la trae: B-A-C-H. La vez que más cerca han estado Fe y Razón.
Será por eso que me hace tanta falta. Gracias, viejo peluca.
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El Agüelo siempre será el Agüelo.
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ResponderEliminarComo cuando llegue al cielo no esté sonando algo de Bach, me voy del tirón para la ventanilla de atención al público y pido una hoja de reclamaciones.
ResponderEliminarErbarme dich, mein Gott. Esto es lo que debe sonar cuando yo suba al cielo. Si no es así seremos dos los que vayamos a atención al cliente celestial.
ResponderEliminarNo está mal entrar escuchando esto: si lo canta Christa Ludwig -mundo viejuno- dejas sin armas al improbable enemigo y, en cualquier caso,pidiendo perdón se entra con educación, que no es poco para quienes somos de "vinilo tempore".
ResponderEliminarMomento mágico aquél en el que descubrimos a Klemperer. Aún guardo los cassettes junto a los Cds, y seguirán ahí por mucha nueva tecnología que exista y grabaciones definitivas de pasiones que sin dejar de ser magníficas, solo por romanticismo no pueden igualar a la "nuestra".
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